Esta historia realizada por Masasumi Kakizaki, comienza con un libro carcomido, tirado en el bosque y en cuya primera hoja dice lo siguiente: <<Me llamo Seiichi Kirishima… soy escritor profesional… me temo que este libro será mi última obra…>>

A partir de ahí nos adentramos en la autobiografía de Kirishima, la cual comienza un día de vacaciones en una isla paradisíaca; el día que decide adentrarse (en coche y durante una hora) junto a su mujer en un camino de montaña, para así alejarse lo máximo posible de la civilización y los testigos que puedan presenciar como la mata… Pero ella huirá y se adentrarán en un laberinto subterráneo, una cueva poblada por sendas galerías que son la morada de un aterrador ser.

Por su carácter autobiográfico y porque la historia se desarrolla tan frenéticamente, que se lee en un suspiro (agónico); el personaje que lleva todo el peso de la trama es Kirishima, el cual sufre viñeta a viñeta una evolución plausible psicológicamente. Pero en consecuencia, los demás personajes son relegados a un segundo plano y no tienen prácticamente ningún desarrollo, solo son piedras en el camino que inducen al protagonista a perder por completo su humanidad.

El dibujo por si solo ya insufla miedo por ser muy detallado (recreándose en la fealdad del monstruo, tanto que da grima), pero también porque es hierático, tétrico y dota de volumen mediante el uso o abuso de sombras; al trascurrir prácticamente toda la historia en cavernas, las viñetas son extremadamente oscuras.

Tanto es así, que seguramente hubiera gastado menos tinta si en vez de dibujar sobre fondo blanco, hubiera realizado los claroscuros sobre fondo negro…  Además, en los momentos más tensos, el autor vicia aún más el ambiente utilizando recursos gráfico que consisten en: finas y blancas líneas oblicuas, salpicaduras o ambas.

Algo que también me parece curioso, es que al revés que en otros mangas, los sendos flashback (intercalados de forma magistral para realizar paralelismos o explicar cómo ha llegado el protagonista a X situación), gráficamente son más claros y nítidos que el resto de la historia, porque al haber transcurrido en el exterior, en ellos abunda el color blanco.

Calificación:

• GUIÓN             7,50

• DIBUJO           8,50

• Nota media          8,00

P.D. El autor dice en el epílogo, que sufrió unas horribles agujetas después de la exploración de una gruta para documentarse (jejeje).

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