El 2015 marcó un hito en mi faceta Otaku, ya que pude ir por primera vez al Salón del Manga de Barcelona. Pero es que, ese mismo año, descubrí a dos autores manga que desde entonces se han convertido en mis favoritos. Éstos eran prácticamente unos desconocidos en el territorio español (o al menos para mí) y ambos fueron publicados por Milky Way, cada uno con una serie de tan solo dos tomos.
Como seguramente ya habréis adivinado, estos dos autores son: Inio Asano y Asumiko Nakamura.
En mi Top 5 Mangakas coloqué como number one a Asano, seguido de cerca por Nakamura. Pero esta decisión fue toma tras realizar el cómputo global de las obras leídas de ambos autores, ya que si me centrara específicamente en «Utsubora» y «La chica a la orilla del mar», mi clara predilecta seria: «Utsubora«. Aunque esto no quita que el manga a reseñar hoy también sea muy bueno…
Es una historia de tránsito a la madurez, de experimentación y exploración juvenil, narrada de forma pausada y profunda, por lo que aun siendo melancólica, saca a relucir los detalles hermosos. En contraposición al rápido crecimiento (auto forzado) de los protagonistas: Koume Sato una chica anodina y fría, que quiere dejar de serlo; Masaki Isobe un chico ensimismado a causa de problemas familiares.
Ambos se embarcan en una relación de instituto, secreta, egoísta pero dependiente y de carácter puramente físico (hay bastantes escenas de sexo), negándose la posibilidad del amor. Sus sentimientos evolucionan, se contraen y se invierten, ya que como las personas reales, tienen sentimientos contradictorios y en constante cambio. Ver la ficha técnica.
Asano, como de costumbre, ilustra un periodo de tiempo importante en la vida de unos personajes impregnados de dura realidad. Lo que en manos de otro Mangaka podría haber sido un Shojo más de instituto, aquí es un Seinen, el amor NO está idealizado, es confuso, complicado de conseguir y mantener… Viéndose esto reflejado en el típico egoísmo de querer lo que no se tiene y despreciarlo cuando se alcanza.
En el plano gráfico, también posee un estilo realista, con fondos detallados y espectaculares, los cuales aunque realizados a partir de fotos, consigue que posean su toque personal e intangible. Además, nos muestra a los personajes desde innumerables puntos de vista, dejando en claro que puede colocarlos en cualquier posición que le plazca y seguir mostrándolos proporcionados anatómicamente.
Por último, añadir que me parece muy curioso que la chica a la orilla del mar, quien da título a la obra, influya tanto en la relación de Sato e Isobe sin apenas aparecer en la obra, ni saber prácticamente nada de ella, por no saber no sabemos ni su nombre.
Calificación:
GUIÓN 9,00
DIBUJO 8,50
Nota media 8,75
P.D. También deciros que Inio Asano vino en 2015 al salón del manga de Barcelona y aunque no pude conseguir una firma, pude verle a muy corta distancia (jijiji).
¿Estás de acuerdo con mi opinión? Deja la tuya en su ficha técnica.